En el DiY que nos proponen en el blog Sweet Lulu se aúnan dos de esas típicas cosas. Así que hoy os propongo una idea muy original de bajo presupuesto y poco valor material, pero seguro que de gran valor para aquellas amantes del craft y las cosas cuquis.
Este San Valentín vamos a regalar anillos de chuches!, no será como decía aquella canción, "Entre tu y yo un diamante es para siempre", pero seguro que a quien se lo regales le sacarás una sonrisa y estoy segura de que las peques de la casa los encontraran irresistibles, eso sí, es importante advertir que estos anillos no son comestibles.
Para hacerlos solo necesitamos: bases de anillo, cintas o piquillos por si queremos rematarlos, pistola de silicona caliente, caramelos, chicles, bastones de azúcar, gominolas, en definitiva, cualquier chuche apetecible y de buen aspecto que nos dará un anillo digno de ser expuesta en cualquier joyería Cartier.
El tutorial lo tenéis aquí en la página que os he indicado arriba. Tan solo tenéis que poner un poco de silicona caliente en la base y pegarle la cuche que habéis elegido, rápido y sencillo.
Los anteriores anillos usan como base una bola de chicle, también podéis hacerlos directamente con caramelos u otras chuches que os gusten, como en este caso.
Si además de sorprender con un anillo tan original queréis sorprender con el packaging os propongo esta idea tan sencilla y vistosa. Vasos de chupito o pequeño tamaño, cápuslas de magdalenas decoradas, si no tenéis cápsulas decoradas podéis recortar un círculo de un papel de regalo chulo, lo atáis con una cinta y mirad que preciosidad de regalo, 100% handmade, low cost pero original y super molón.
Espero que os guste :)
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